El ejecutivo confirmó esta decisión vía telefónica con la agencia de noticias Reuters, aunque también se negó a comentar sobre la información difundida por diferentes medios franceses, que aseguran será reemplazado por Stephane Bianchi, ex director general del grupo francés de cosméticos Yves Rocher.
«Estoy renunciando a mis responsabilidades operativas, pero continúo como presidente no ejecutivo de la unidad de relojes de LVMH y las marcas TAG Heuer, Zenith y Hublot… Ya no cortaré las cebollas y lloraré en la cocina a primera hora de la mañana; iré más tarde para ver si están listas.», dijo Biver, de 69 años, quien aún se recupera de graves problemas de salud.
A Jean-Claude Biver se le considera una de las figuras más prominentes en la industria relojera. Ha estado con LVMH desde 2008, cuando el conglomerado de lujo compró la marca Hublot, misma que dirigió con gran éxito desde ese mismo año. Fue nombrado presidente de la división de relojes de LVMH en 2014, a cargo de Hublot, TAG Heuer y Zenith. El ejecutivo también fue pieza clave en el desarrollo y crecimiento de marcas como Blancpain y Omega, de Grupo Swatch.
LVMH no ha hecho anuncios oficiales sobre quién podría asumir el puesto de Biver, si el cargo continúa. Los rumores de la industria dicen que Frederic Arnault, hijo del presidente y CEO del grupo, Bernard Arnault, puede tomar un papel más activo en la estrategia y los negocios digitales con la marca más grande de la división, TAG Heuer.
