El trabajo conjunto entre el grupo y la manufactura ha dado como resultado una nueva aleación de compensación no magnética para el espiral, uno de los componentes clave de cualquier movimiento mecánico.
Bautizado como Nivachron, este desarrollo sucede en importancia al silicio, otro de los orgullos de Grupo Swatch en cuanto a innovación se refiere. Esta aleación permite una reducción considerable en la influencia del efecto residual de un campo magnético en el reloj (una reducción en un factor de 10 a 20, dependiendo del calibre).
De fabricación suiza, el nuevo espiral está hecho de una base de titanio, un material muy efectivo contra variaciones de temperatura y de gran resistencia al choque. Estas cualidades resultan en una mejora significativa en el rendimiento cronométrico.
Respecto a los detalles sobre la cooperación entre Swatch Group y la oriunda de Le Brassus, Audemars Piguet, no se ha revelado mucho, pero el nombre de este desarrollo señala a una de las filiales del grupo encargadas de la producción de componentes, Swatch Nivarox-Far.