Tudor presenta una nueva pieza dotada de gran tradición, el Black Bay Fifty-Eight «Navy Blue», un reloj de buceo que perpetúa el legado de la firma, pues su nombre hace referencia al año de 1958, cuando la Manufactura introdujo una edición hermética hasta los 200 metros, llamada «Big Crown».
Por otra parte, la denominación «Navy Blue» rememora el distintivo estético «azul Tudor», que se originó en 1969 con el lanzamiento de una pieza con esfera y bisel azul, esta característica se adoptó posteriormente en los relojes instrumento de Tudor que utilizaba la Marina francesa durante la década de 1970.
Black Bay Fifty-Eight «Navy Blue».El Black Bay Fifty-Eight «Navy Blue» se presenta en una caja de acero inoxidable 316L, mantiene un diámetro de 39 mm al igual que los modelos típicos de 1950. Ofrece una hermeticidad de 200 metros e integra un bisel con disco de aluminio azul mate, cuya graduación de 60 minutos permite temporizar los tiempos de inmersión.
La corona lleva grabada la rosa de Tudor.La esfera azul está protegida por un cristal de zafiro abombado e integra las icónicas manecillas «Snowflake», que desde su origen en 1969 se han convertido en un rasgo distintivo de la marca. Sus funciones de horas, minutos, segundos y parada del segundero para ajustar con precisión el tiempo, se alimentan del calibre de manufactura MT5402, un movimiento automático con una notable reserva de marcha de hasta 70 horas. Este mecanismo, equipado con una espiral de silicio, cuenta con certificación de cronómetro COSC.
Calibre de manufactura MT5402.El Black Bay Fifty-Eight «Navy Blue» se combina con una correa Jacquard de tejido azul, cabe señalar que las correas Jacquard celebran 10 años con Tudor. Además, la pieza también se puede utilizar con un brazalete de acero o con una correa azul de tacto suave.
Correa Jacquard de tejido azul. TE RECOMENDAMOS: Pelagos de Tudor, eficiencia submarina
