En la reciente edición de LVMH Watch Week, Zenith introdujo un nuevo modelo Defy llamado Skyline, se trata de una edición que se inspira en la geometría octogonal de los primeros relojes Defy, como el recientemente recuperado Defy A3642, al cual le dedicamos una reseña y la puedes encontrar aquí. Con la dicha robustez de los predecesores, el Defy Skyline presenta una estética facetada y una atractiva esfera que simula el cielo nocturno, un elemento importante en la historia de la marca, pues fue una inspiración importante del fundador Georges-Favre Jacot, quien le dio el nombre de punto más alto del cielo nocturno (Zenith) a la Manufactura.
El Defy Skyline presenta una caja de acero de 41 mm, con un bisel facetado y corona a rosca blasonada. Ofrece una hermeticidad de hasta 100 metros y destaca por sus bordes definidos. Por el reverso abierto se puede apreciar el movimiento El Primero 3620, del cual hablaremos más adelante. En cuanto a la caja hay que añadir que integra un brazalete de acero con arquitectura en sintonía con el diseño; además, cuenta con sistema integral de correas intercambiables, cada uno de los tres nuevos modelos incluye una correa de caucho.
La carátula, en plateada, negra o gris, según la versión, evoca el cielo nocturno mediante un motivo geométrico, tachonado de estrellas con acabado rayos de sol. Este patrón, alineado de estrellas de cuatro puntas grabadas, reinterpretan de una forma moderna el logotipo de la doble Z de Zenith de los años 60. Otro elemento destacado se encuentra a las 9 en punto, en el contador, pues se trata de una indicación de las centésimas de segundo, que además salta en incrementos fijos, completando una revolución cada 10 segundos. En la contraparte, a las 3 en punto, se puede consultar la fecha. Cabe señalar que tanto índices como agujas centrales contienen Super-LumiNova SLN C1.
En su interior, el nuevo Defy Skyline cuenta con el mencionado calibre El Primero 3620, un movimiento automático con frecuencia de 5 Hz. Este mecanismo cuenta con áncora y rueda de escape de silicio, además de una autonomía aproximada de 60 horas. Por el reverso se puede apreciar su masa oscilante con motivo de estrella, un rasgo ya distintivo de Zenith.